Bienestar integral de la mujer

Doctora: no tengo ganas de sexo!

9 de agosto de 2020
deseo sexual y testosterona

 

Este artículo está escrito y dirigido a las mujeres, sin embargo contiene información que puede ser muy útil también para hombres y podría ayudarles a entender un poco más acerca de la respuesta sexual femenina y contribuir a enriquecer la vida sexual tanto de hombres como de mujeres.

En el día Internacional del orgasmo femenino, el cual se conmemora con el objetivo de crear conciencia sobre la sexualidad femenina y el derecho al placer de las mujeres, les quiero regalar a todas mis pacientes y amigas, estas líneas referentes a mi experiencia y mi visión tras muchos años de escuchar esta queja de un porcentaje nada despreciable de mujeres, que normalmente se acompaña de gran preocupación y necesidad de ayuda.

Comenzaré diciendo que el órgano sexual más importante de la mujer es el cerebro, sin duda alguna, porque a nosotras desde el punto de vista de la fisiología de la respuesta sexual y la excitación, nos influye mucho más todo lo que pueda estar sucediendo en el mundo exterior, el cansancio, el estrés, las emociones, alguna situación por la que estemos atravesando, a la hora de tener relaciones sexuales, en comparación con el hombre, en general, evidentemente cada ser humano es único y diferente. Pero es un hecho que, si dormimos poco, si tenemos una enorme preocupación, si somos madres de bebés muy pequeños, si hemos discutido previamente, si tenemos problemas laborales, pues todas estas cosas pueden repercutir negativamente sobre el deseo sexual y quitarnos las ganas, sobre todo pueden influir en el impulso sexual, el que nos lleva a tomar la iniciativa.

Luego, una de las consultas más frecuentes en cuanto a disminución de la calidad de vida sexual se produce en mujeres a partir de 40 años en adelante, a veces menores, que se encuentran en relaciones estables con lazos afectivos sólidos y que sus relaciones previas eran plenas y satisfactorias. Me llegan muy preocupadas porque no saben que hacer: “Doctora, no tengo ganas de nada…no me apetece tener relaciones, mi libido está en cero, podría vivir perfectamente sin tener relaciones sexuales y me siento muy mal porque quiero a mi pareja y me gusta, pero prefiero dormir, estoy muy cansada. ¿Hay alguna forma de mejorar esto? ¿Será siempre así? Soy muy joven, me gustaría hacer algo.

En el caso de estas pacientes, se producen cambios hormonales que, sumados a las obligaciones sociales y la rutina, tienen un impacto negativo sobre la calidad de vida sexual de la pareja. Muchas parejas son comprensivas durante un tiempo, pero esto les llega a afectar porque su ritmo sexual acaba siendo diferente y si no ofrecemos alternativas de ayuda y se fomenta la comunicación, en algunos casos pueden haber conflictos e incluso separaciones y lo terrible es que en realidad esa mujer quiere volver a tener su vida sexual de antes pero no sabe cómo hacerlo y se siente incomprendida y frustrada.

Es nuestro deber y responsabilidad ofrecerle recursos para mejorar su vida sexual. Toda mujer tiene derecho a tener una vida sexual plena y satisfactoria, sola o en pareja.

sexualidad y hormonas

Lo primero que hay que hacer es una evaluación ginecológica completa, un perfil de analíticas hormonales e interrogar su situación personal y laboral, ofrecer ayuda psicológica en caso de ser necesario, recomendar prácticas como el yoga, mindfulness y meditación como técnicas de control del estrés y ansiedad y comunicarse con su pareja y expresar sus sentimientos para buscar soluciones juntos, en lugar de ignorar el problema.

En cuanto al factor hormonal, este va a ser uno de los principales causantes de la disminución de la libido. La mujer produce pequeñas concentraciones de testosterona que comienzan a disminuir lentamente a partir de los 25 años, siendo más marcado este descenso desde los 40 años cuando tenemos la mitad de los valores de testosterona y más marcado aún  en la pre menopausia.

La testosterona en la mujer es una hormona con funciones importantes y participa en el deseo sexual y la sensibilidad del clítoris, el orgasmo femenino y su intensidad, la toma de decisiones, la seguridad, la memoria, la autoestima. También a nivel metabólico facilitando la formación de masa muscular, mejorando la recuperación tras el ejercicio y la disminución de tejido graso. Por estos motivos algunas veces escuchamos hacer alusión a la testosterona como la hormona sexual y sin duda, a medida que nuestros ovarios pierden reserva, nuestras ovulaciones tienen menos calidad y disminuye nuestra producción de testosterona, motivos por los cuales podemos sufrir de algunos síntomas derivados de esa carencia.

Hoy en día se puede corregir el déficit de testosterona mediante hormonas bioidénticas, que tienen una estructura igual a la testosterona natural y provienen de fuentes naturales. Se elaboran en forma de pellets o implantes, mal llamados chips (en algunos países se conoce como el “chip sexual”) y se implantan el el tejido graso mediante un procedimiento sencillo e indoloro. Es una terapia bastante segura pero que siempre debe ser individualizada y evaluada por un profesional que tenga suficiente preparación y conocimientos sobre todo en materia hormonal porque de esto va a depender el éxito de la terapia, su efectividad y su pericia en manejar a la paciente para mejorar su calidad de vida de forma segura.

La testosterona bioidéntica también se puede suplementar en forma de crema en fórmulas magistrales y hoy en día se trabaja en nuevas preparaciones. También a través de precursores hormonales que es lo que el cuerpo necesita para elaborar hormonas. Si los precursores están bajos, no podremos fabricar hormonas. Se usa la pregnenolona y el DHEA a dosis individualizadas.

Dentro de la disminución del deseo sexual y de la lubricación de causa hormonal, también podría deberse al uso de anticonceptivos hormonales orales, sobre todo cuando se trata de pacientes jóvenes y no encontramos ninguna otra explicación. El anticonceptivo inhibe la ovulación para evitar el embarazo y esto tiene como consecuencia que no ocurre el pico de testosterona propio de los días fértiles, y puede haber hipoestrogenismo, lo cual disminuye la lubricación vaginal. Si es el caso, hay que evaluar cambiar a otra combinación u ofrecer otros métodos anticonceptivos que no afecten la vida sexual de la mujer. Algunas lo toleran bien utilizando lubricantes, lo importante es siempre evaluar la relación riesgo beneficio, inclinando la balanza hacia los efectos positivos por encima de los negativos.

Otra situación muy especial es el postparto y periodo de lactancia. Durante los primeros meses de vida posteriores al nacimiento de un bebé, las mujeres experimentamos cambios hormonales muy intensos que muchas veces afectan nuestra sexualidad. Hay una combinación de factores, la lactancia produce sequedad vaginal, el parto o cesárea han dejado cambios físicos evidentes en nuestro cuerpo, el final de la cuarentena deja una revolución hormonal en nosotras muy difícil de pasar desapercibida. Dormimos poco, estamos agotadas, nos faltan manos para el cuidado de la pequeña personita que ahora ocupa casi la totalidad de nuestro tiempo. La maternidad suele afectar la expresión de nuestra sexualidad, nos sentimos más madres que mujeres y encima de todo, la sequedad genital culpa del cambio hormonal provoca muchas molestias. Por suerte todo esto pasa, es tan solo una etapa de transición y es hasta natural que ocurra. Con un poco de paciencia, cuidados y comunicación, todo pasa y ya luego las cosas vuelven a ser como antes en la mayoría de los casos. En ocasiones puede haber una episiotomía dolorosa, algún desgarro producto de un parto traumático, depresión postparto o alguna otra alteración que requiera atención y cuidados especiales para retornar a una sexualidad plena.

La nutrición una vez más, tiene un papel importante en la producción de hormonas. No deben faltar las grasas buenas, pues son precursores de las hormonas sexuales, los ácidos grasos omega 3, y debemos procurar evitar el azúcar y las harinas refinadas. Si estamos bien nutridas tendremos energía y buen humor, nadie que se sienta débil, cansada y falta de energía, gozará de una sexualidad plena.

Otra queja muy frecuente en la peri menopausia y menopausia en relación con la disminución de la libido y dolor acompañando a las relaciones sexuales se debe a sequedad vaginal, disminución de la lubricación y atrofia genital. Con el paso del tiempo, la piel de vulva y vagina se van adelgazando y perdiendo su barrera protectora y se producen menos secreciones durante la fase de excitación. Esto es debido a la disminución de los estrógenos y me atrevo a decir que es la causa que produce mayor problemas a la pareja: a la paciente le duele, no disfruta, no lubrica, la fase de juegos previos dura poco, la fricción le hace daño, se irrita y la pasa mal, en conclusión ella lo evita, prefiere concentrarse en otras actividades y su vida sexual pasa a último plano, algunas lo callan, lo ignoran, ellos no entienden que le ocurre a su mujer, que años atrás disfrutaba de las relaciones, a veces él piensa que ella no lo quiere, que él no le atrae, en fin, problemas a la vista, o simplemente ambos deciden ignorar el tema y seguir con su vida prescindiendo de la intimidad. Es injusto con ambos, mi meta es ayudarles ya que hoy en día disponemos de muchas herramientas y recursos que pueden aportar mucha mejoría.

La atrofia vulvo vaginal es de origen hormonal por déficit de estrógenos, por lo tanto la terapia hormonal  la previene y mejora muchísimo. Y en el caso de estar contraindicada o que la paciente no quiera recibir hormonas, tenemos varias opciones de tratamiento local, muy efectivas para mejorar : entre ellas, la aplicación de ácido hialurónico en vulva y vagina, que se realiza en el consultorio, se obtienen resultados inmediatos y es muy efectiva para disminuir el dolor a la penetración y también el aspecto de los genitales. Se debe realizar una vez al año aproximadamente y por manos bien formadas en la técnica. El plasma Rico en Plaquetas consiste en centrifugar una muestra de sangre y obtener a partir de ahí, los factores de crecimiento presentes en el plasma de la paciente que van a ayudar a reparar esa piel de la vulva. No tiene efectos secundarios ni complicaciones, mejora condiciones como el liquen vulvar y la atrofia.

El láser vaginal, aplicando calor en la vagina, va a estimular la producción de colágeno y favorecer la lubricación y el tensado vaginal , mejorando las sensaciones y “rejuveneciendo” la zona íntima. También en algunas pacientes ayuda realizar técnicas quirúrgicas para mejorar el aspecto de los genitales, infiltración de tejido graso propio, labioplastia o vulvoperineoplastia, corrección de prolapsos, mejorando la función y la estética, por tanto la auto imagen de nuestra paciente.

El clítoris es el órgano sexual por excelencia de la mujer y el principal responsable de nuestros orgasmos. Lo que vemos es tan sólo la punta del iceberg y si viéramos una imagen de este en su parte interna es significativamente mayor, y lo más interesante del asunto es que es un órgano cuya función es única y exclusivamente darnos placer. Es el único órgano del cuerpo humano con esta característica tan especial. Por eso hay que conocernos bien, tocarnos y entendernos, comunicarnos con nuestra pareja si la hay, ya que es la única manera de alcanzar la plenitud sexual.

La mayoría de los orgasmos femeninos van a  ser producto de la estimulación del clítoris, a mayor tiempo de excitación y juegos previos, mejor es el orgasmo. Relaciones sexuales sin juegos previos, con apenas lubricación y directo a la penetración es garantía de insatisfacción. Esto hay que saberlo y hablarlo, muchas mujeres se callan, muchos hombres no lo saben, y se están perdiendo de una gran parte del placer, por eso no hay que tener vergüenza para hablar abiertamente de sexualidad y lo que le gusta a cada uno porque esto garantizará la plenitud de la relación de pareja.

Hay muchas mujeres que no saben lo que es un orgasmo, que nunca lo han experimentado y hay culturas que aún penalizan el disfrute femenino, es un verdadero crimen, hay que perder el miedo a hablar de sexo, hay que normalizar el hacerlo y empoderar a la mujer para atreverse a explorar su sexualidad de manera segura y libre de culpa.

La penetración es importante pero no lo es todo en una relación sexual, la estimulación manual o con juguetes sexuales, vibradores u otros, es recomendable y aporta un cambio de rutina y exploración que puede ser favorable, todo depende de lo que le guste o no a cada quien.

El uso de lubricantes es muy recomendable, incluso los hay que producen efecto calor y aumentan el riego sanguíneo en la zona, lo cual es de gran ayuda para pacientes que les cuesta un poco más la excitación. También aconsejo la hidratación vulvo vaginal, ya que esta área se empieza a resecar con los cambios de la pre menopausia y no hay que esperar a que haya una atrofia importante. Hidrata cada día un poco como lo haces con la cara y el resto del cuerpo, Tu vulva y vagina son parte de tu cuerpo, no lo olvides.

Pensar y dedicar tiempo a la vulva y la vagina y sus cuidados, aumenta la posibilidad de mejorar tu vida sexual, órgano que no se usa, se atrofia, piensa en sexo, aunque sea unos minutos al día. Todo requiere un esfuerzo y esta área de tu vida también, nada llega por arte de magia.

Como les decía, todo lo que mejore el riego sanguíneo de los genitales, será positivo para la sexualidad, por tanto, se puede ejercitar la musculatura del suelo pélvico mediante yoga, pilates y ejercicios de Kegel.

También puedes ejercitar la vagina específicamente usando bolas chinas, pesas vaginales y mediante las mismas relaciones sexuales. Mientras más relaciones tengas, mejor estará la irrigación y la hidratación de los genitales.

Los cambios de rutina, de lugar, de posturas, el uso de material audiovisual, pornografía tradicional o audio pornografía, que es muy recomendable para las mujeres porque al ser menos gráfica estimula la creatividad y eso nos agrada mucho. La lectura con contenido sexual explícito es otra manera de trabajar el cerebro y desarrollar tu lado más sexual.

La sexualidad es vida, es placer y es endorfinas. No pierdas la ocasión de conversar con tu ginecólogo acerca de tus problemas, miedos, cambios y las opciones que tienes para mejorar. En ocasiones, hay parejas que se benefician del manejo por parte del sexólogo con gran mejoría que agradecen. El punto es que siempre podemos hacer algo para mejorar.

La sexualidad de la mujer es tan compleja como la mujer en sí, su fisiología es un engranaje de mecanismos apasionante y los ginecólogos debemos ser tus aliados para poder resolver esos cambios que deterioran nuestra calidad de vida y autoestima, que finalmente tendrán una repercusión negativa en nuestra vida y la de nuestra pareja.

Para finalizar unos consejos a modo práctico para tener más ganas y mejor vida sexual, sola o en pareja:

-Visita a tu ginecólogo una vez al año y habla de tu vida sexual

-Mantener una higiene íntima adecuada y una buena alimentación, rica en grasas buenas: salmón, huevos, aguacate, nueces, aceite de oliva virgen extra, mariscos y pescados, evita el azúcar y harinas refinadas. Aumenta el consumo de frutas y verduras.

-Duerme 7 a 8 horas diarias, nadie que esté cansado tendrá muchas ganas de sexo

-Utiliza un buen lubricante recomendado por tu ginecólogo

-Ejercita y piensa en tu vagina, no la dejes en el último plano, has yoga, pilates o usa  bolas chinas.

-Conversa con tu pareja si la hay, de tus inquietudes y de lo que te gusta o no te gusta

-No dejes la intimidad en el último plano, dedica un tiempo suficiente y privilegiado en tu agenda. Dedica un tiempo especial para la sexualidad y para explorar juguetes, libros, películas o experiencias que a ambos les apetezca compartir.

-Usa ropa interior sexy y que te haga sentir atractiva.

-Indaga acerca de opciones hormonales y complementos nutricionales que puedan mejorar tu sexualidad con tu ginecólogo, ve siempre con profesionales acreditados

-Tu cerebro es tu mayor órgano sexual, trabaja la imaginación y la creatividad, esfuérzate para mejorar tu vida sexual, toda mejoría requiere un trabajo.

Espero que este artículo haya sido de utilidad, pueden escribirme alguna duda concreta en la que pueda ser de ayuda. Tienen mis datos en la página web www.doctorajimenez.com y que disfruten del día internacional del orgasmo.

Doctora Radharani Jiménez